Hace unos meses solicitaron la universalización y aumento de cupos, pero aún no hay respuesta de la Provincia. Los alimentos se cubren con Desarrollo Social. En las escuelas siguen los trabajos de reparación.
Hace unos meses que la pandemia ha obligado a que las actividades en todo el distrito, como en todo el país, tengan un freno obligado. En medio del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio sin embargo, el trabajo del Consejo Escolar ha seguido de forma constante sobre todo, con la entrega de los módulos alimentarios.
De hecho, con los alimentos del Servicio Alimentario Escolar, desde el Consejo solicitaron en junio la universalización y aumento de cupos ya que, con el avance la crisis social, cada vez más chicos necesitaban los alimentos de las escuelas.
Asimismo, continuaron realizando refacciones en distintos edificios para lograr aprovechar, sin poner en riesgo la salud de ningún trabajador, el tiempo en que los chicos no tuviesen que estar en las aulas para poder reacondicionar todo.
Patricio Diez, presidente del Consejo Escolar, dialogó con El Lugareño sobre el trabajo al momento en mantenimiento y SAE. “Por el momento no tuvimos respuesta por parte de la Provincia (por el SAE), pero entiendo que Suteba haría el reclamo también. Estamos suplantando ese pedido con productos de Desarrollo Social del Municipio, pero SAE manda el mismo cupo, pero sí nos mandaron un aumento del bolsón. Hoy en vez de gastar 750 pesos, gastamos 830 porque los alimentos van aumentando”, indicó Diez.
Sin embargo, destacó que aún tienen los 2.926 cupos aprobados en marzo y que ese número no ha cambiado.
Sobre el trabajo que lleva adelante el Consejo durante el período de la pandemia, Diez detalló que hay consejeros que son personal de riesgo pero que, los que sí pueden trabajar, están asistiendo los jueves de forma alternada: “atendemos por guardia, donde evacuamos las consultas y vamos a las escuelas, recorremos. El otro día, al 910 por pérdida de agua, alarmas. Aprovechamos cuando descargamos bolsones o entregamos mercadería para arreglar y ver los problemas”.
“Tratamos de solucionar los problemas lo más rápido posible. Seguimos trabajando aunque no tenemos tanta demanda porque las escuelas están cerradas pero siempre, en la medida de lo posible, queremos cumplir”, indicó Diez.
Es que sin los chicos en las aulas hay otra disponibilidad para poder arreglar los conflictos sobre todo eléctricos o de conexiones de gas, ya que no es necesario suspender clases para poder arreglarlos. “Es más práctico, pero es una lástima que los chicos no estén en las escuelas”, dijo. Por último, sobre su opinión de la vuelta a clases durante este año, tema que tiene en vilo a grandes y chicos, Patricio Diez aseguró que lo más importante es entender que al momento, no hay nada oficial. “No hay información oficial, pero creo sinceramente que los más chicos no van a arrancar. Los más grandes, no puedo asegurarlo pero creo, por cómo se está dando todo, con la cantidad de casos, será difícil que arranquen las clases en octubre o noviembre. Ojalá, porque si eso pasa, significa que el virus bajó, pero los números muestran otra cosa”, cerró Patricio Diez.
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