Tras un operativo conjunto entre la Policía de la Ciudad de Buenos Aires y la fuerza de Parada Robles, aprehendieron a miembros de una banda de robo automotor que operaba en Capital Federal. Además, se secuestraron elementos clave para la causa.
Un nuevo golpe al delito se concretó en el barrio Parque Sakura, donde en las últimas horas fue desmantelada una banda criminal dedicada al robo de vehículos de alta gama. El operativo se llevó adelante tras una investigación articulada entre la Policía de la Ciudad de Buenos Aires y efectivos locales de Parada Robles, quienes cumplieron un rol fundamental en la captura de los sospechosos.
El procedimiento tuvo lugar en una vivienda ubicada en la calle Machado al 639, donde se hallaron llaves de distintos automóviles, chapas patentes, inhibidores de señal y otros elementos utilizados para cometer los delitos. Según confirmaron fuentes policiales, los detenidos habían fijado residencia en el barrio hacía pocos meses, como parte de una estrategia para evitar ser detectados.
Durante el allanamiento, los agentes detuvieron a dos adultos, presuntamente vinculados a una red más amplia que operaba en diferentes zonas de Capital Federal y tenía ramificaciones logísticas en el norte bonaerense. Además, se encontró en el lugar a un menor de apenas un año, hijo de uno de los implicados, quien quedó bajo el resguardo de un familiar cercano.
La vivienda en Sakura funcionaba, según se presume, como depósito transitorio de vehículos robados y objetos sustraídos, por lo que el hallazgo representa una pieza clave en la causa. La colaboración de la Policía de Parada Robles fue destacada especialmente por las autoridades porteñas, quienes remarcaron la importancia del trabajo coordinado entre jurisdicciones para combatir el delito complejo.
La causa sigue en curso, con el objetivo de determinar el paradero de los vehículos robados y localizar otras posibles propiedades en Exaltación de la Cruz que hayan sido utilizadas como parte del esquema delictivo.
Con este operativo, Exaltación de la Cruz se convierte en un nuevo escenario clave en el mapa de la lucha contra el crimen organizado, demostrando la necesidad de reforzar la vigilancia y la cooperación entre fuerzas para frenar este tipo de delitos que afectan a múltiples jurisdicciones.