El Jefe Comunal palpita el final de su mandato, realizando un balance de sus últimos ocho años al frente de la Comuna. Logros, deudas y una historia de 28 años ligado a la política del distrito con Defensa Comunal.
Tras ocho años consecutivos de gobierno, el intendente Adrián Sánchez prepara su salida del Municipio, la cual también significará, al menos por ahora, su alejamiento de la política.
El Jefe Comunal dialogó con El Lugareño y realizó un recorrido por su trayectoria en la función pública, que lo tuvo ocupando diversos roles pero siempre con un mismo objetivo, buscar lo mejor para su “patria chica”, como le gusta referirse al hablar de su querida Exaltación de la Cruz.
De esta manera, el hombre que todos en el pueblo conocen, el tipo de familia que siempre anda con su humor a flor de piel, y que hasta ha demostrado sus dotes para el baile frente a la comunidad, dejará su lugar con logros, algunas deudas, pero con la tranquilidad de “haber dejado todo por la camiseta”. Y de esta manera dará paso a un nuevo capítulo del distrito, que llenará sus primeras líneas a partir del próximo 10 de diciembre, cuando el electo Diego Nanni asuma la intendencia del distrito.
¿Cómo se viven los últimos días como intendente de Exaltación luego de tanto tiempo?
Pareciera que es una fecha que nunca va a llegar entonces uno se pone observador, analítico y nostálgico. Pero bueno, la vida tiene que continuar y lo importante es agradecer el poder estar acá y tener la posibilidad de hacer el racconto de mi vida en la faz política, cosa que no me hubiera imaginado nunca.
¿En qué momento la política pasó de ser algo difícil de imaginar a una realidad?
Yo vengo de mi actividad de más de 40 años en la inmobiliaria, y hace 28 años fue que un amigo me invitó y aquí estamos.
Primeramente ayudé a Ricardo (Bozzani) para que gane, comprometiéndome como si hubiera sido yo el candidato, y luego de eso me invitó a que sea su Secretario de Gobierno, un puesto que no sabía que era porque yo iba a la Municipalidad solamente a pagar impuestos.
Desde 1991 a 1995 fui secretario de Gobierno, de Hacienda y de Desarrollo Social, y en ese mismo año del ’95 fui de primer concejal. En 1999 nuevamente ocupé el lugar de primer concejal y ganamos casi con el 80 por ciento de los votos. Allí fui presidente del Concejo Deliberante, hasta que en el año 2000 Ricardo me dijo que había muchas posibilidades de que asuma. Finalmente se concretó el 6 de octubre de ese año y asumí 3 años, 2 meses y 5 días.
Tras ese período hubo un primer alejamiento…
De ahí me retiré. Desde el 2003 y hasta el 2009 cuando me convocaron como un soldado dentro de Defensa Comunal, y fui por tercera vez primer candidato a concejal, quedando bien posicionado para ir por la intendencia en el 2011, donde ganamos una elección histórica metiendo a todos los concejales (seis) y siendo electo intendente.
Luego reedité en 2015 con menos porcentaje, pero al fin y al cabo ganamos y aquí estamos, terminando casi mi tercer mandato, con la sensación de haber cumplido, de haber puesto todo en la cancha y de haber jugado por la camiseta que es nuestra patria chica de Exaltación de la Cruz.
¿Cuáles han sido las claves para gobernar el distrito y brindar respuestas a los vecinos?
En estos pueblos tenemos una particularidad que nos vuelve muy distinto a las grandes ciudades, y es la alta calidad institucional. Esto se da porque acá somos personas con nombre y apellido, no un número, y eso hace que tengas muchas más ventajas que desventajas.
Yo vengo de la representación de un partido local, vecinal, que ha hecho alianzas en lo que tiene que ver con el arte de comunicarse entre las personas y poder sacarse la camiseta de las agrupaciones políticas para poder poner al Estado por delante de todo, para logar satisfacer las necesidades de la gente.
¿Cuáles son los logros conseguidos durante su mandato que más valora?
Creo que fueron muchos, pero hay que destacar los más importantes, que vinieron a solucionar problemas. En principio podemos celebrar que se está por terminar la obra hidráulica, de saneamiento y ampliación de la entrada al pueblo de Arroyo de la Cruz, donde se han hecho canales y estamos a días de abrir los terraplenes del ferrocarril Mitre, y eso va a aportar que no se va a inundar más la ribera de todos los vecinos que están en la entrada de Capilla del Señor. Es una obra muy esperada de muchos años que podemos realizar. Hemos hecho obras hidráulicas en todo el distrito, en el corredor de la Ruta 8, hemos perforado los cascos de Capilla, en Cardales. De eso hemos hecho una política de estado.
En el ámbito de educación he propuesto hacer ocho escuelas. Logramos hacer cuatro, una está pronta a terminar, y tres fueron licitadas, siendo dos adjudicadas. Y de no haber sido por la crisis que vivimos el año pasado, todas podrían estar en construcción.
En cuanto a seguridad, casi triplicamos las fuerzas y los comandos. No así en cuanto a móviles, que durante este gobierno se consiguieron para los comandos provinciales pero no para las policías comunales. Y hemos aumentado considerablemente las cámaras y hemos readecuado el Centro de Atención al Vecino.
Y finalmente el Hospital, que ha sido una decisión desde 1991 de Ricardo Bozzani, y que se convirtió en la columna vertebral de las políticas de salud, conjuntamente con las unidades sanitarias y todas las áreas preventivas. Hemos hecho una fuerte inversión, para tener casi 100 camas, una alta complejidad, que se va a transformar en un mayor índice de coparticipación para el año que viene que es algo muy importante, y un sistema de hemodinamia que no es menor porque hemos salvado la vida de muchos vecinos a lo largo de este año.
Acciones que no se ven…
Uno piensa que las grandes obras y logros son los que se ven, pero también están las que no se ven y que marcan la identidad y la personalidad de una comunidad.
En ese sentido tratamos de achicar la grieta todos los días y poder ayudar a las personas sin distinciones. Somos todos iguales y en el pueblo no tomamos diferencias. Hasta los denominados opositores políticos siempre han tenido las puertas abiertas y se han sorprendido porque hemos profundizado la voluntad en poder solucionarles los problemas que tengan.
Todas las personas piensan diferente, pero hemos hecho un trabajo minucioso de estar al lado del vecino de verdad, y darle la importancia que merecen, sobre todo cuando tienen un problema. Y esto se traduce muchas veces en el ‘bajo costo y alto impacto’, porque las cosas no siempre se arreglan con dinero, sino que un oído a tiempo o una palabra o consejo ayuda más.
Estas cosas se logran cuando se tiene amor por lo que se hace, amor por la camiseta. Yo descubrí mi fuerte vocación de servicio a partir de la política, y por eso estoy nostálgico en esta etapa. Pero voy a seguir ayudando desde afuera.
¿Queda alguna deuda que no se haya podido cumplir?
Creo que mi mayor déficit ha sido no haber construido viviendas, pero sabemos lo costoso que es hoy. Es una cuestión que trae aparejados problemas sociales, porque las nuevas parejas quizás tienen que vivir hacinadas con los familiares, y es un inconveniente más. Ojalá se solucionen los problemas económicos para que se pueda ir ordenando la familia, que es la célula base de toda comunidad.
¿Cómo ha sido el trato con la Provincia y la Nación siendo de otro color político?
La verdad es que siempre me abrieron la puerta, y no es que haya conseguido todo lo que pretendimos porque hay colegas del color político oficial que han conseguido mucho más, pero no me puedo quejar porque me han dado bastante.
En ese marco estamos esperando que llegue la totalidad de los 49 millones de pesos para mejorar la infraestructura en Arroyo de la Cruz, que es donde más crecimiento tuvo nuestro distrito, y es debido que se ha escuchado nuestro reclamo.
También hemos recibido el Fondo de Infraestructura Municipal que ha votado la Legislatura y hemos decidido que eso vaya para nuestro hospital y unidades sanitarias. Y tenemos casi confirmado los fondos para hacer el nuevo CAPS de Los Cardales.
¿Y el trabajo en el distrito teniendo en cuenta a la oposición en el HCD?
La oposición ha hecho su trabajo, pero no tuvimos inconvenientes porque hemos podido hacer alianzas y consensuar con distintos concejales. La oposición ha estado dividida en estos últimos años con Cambiemos, el Frente Renovador y el PJ. Nosotros con parte del PJ y el Frente Renovador hemos podido consensuar en nuestros proyectos de ordenanza y resoluciones, aunque no así con Cambiemos, con quienes hemos tenido un enfrentamiento más agudo.
Pero creo que vamos a poder finalizar bien y vamos a poder llevar adelante todos los proyectos que tenemos pensado a futuro. Y a partir del año que viene se va a dar una situación casi de empate a la que se tendrá que enfrentar el próximo gobierno, así que veremos cómo se plantea el escenario.
¿Qué tan importante es para un intendente poder apoyarse en el equipo de trabajo?
Significa tener la tranquilidad de que se puede continuar con la labor que uno busca cumplir, y acá somos todos importantes pero ninguno imprescindible. Los hombres pasan pero las instituciones quedan, así que eso es lo importante, formar equipos, hablar siempre con la verdad y no tener nada que ocultar.
Teniendo en cuenta esto, ¿cuál será su rol al terminar este mandato?
Quieren que me quede pero no es mi idea. No quiero que se malentienda, porque no es que no me guste participar, pero quiero tener la libertad de manejar mis tiempos, poder un día estar y aconsejar, pero otro día quizás no. Más allá de eso, me va a quedar ese compromiso de darle una mano a Diego (Nanni) que en pocos días va a ser nuestro intendente.
¿Esto significa que ya se ha cumplido un ciclo en cuanto a la política?
Uno se retira cuando te llama el Señor. Hoy no estoy anotado, pero uno siempre va a estar a la expectativa de si le interesa alguna propuesta. Pero la realidad es que hoy no estoy para cubrir un puesto ejecutivo.
Quizás pueda llegar alguna propuesta como coordinador de municipios, que hemos hablado con los mandatarios del consorcio de zona norte, y eso me podría llegar a interesar porque también aporta un grado de libertad, pero todo se verá a su tiempo.
Hay varias posibilidades, y además tengo un emprendimiento inmobiliario que por suerte tiene un buen nombre.
¿Cuál piensa que será el mayor desafío para Diego Nanni y que le aconsejaría?
El desafió es que no cambie, que siga con el mismo compromiso, las mismas ganas, que sea aperturista y escuche. Además, yo le recomiendo que cuando no sepa pregunte, porque dicen que la persona que más éxito tiene es la que menos se equivoca, y yo creo que si él nos tiene confianza a Ricardo (Bozzani), Horacio (Errazu) y a mí, después será él quien tome la última decisión, pero con la experiencia de quienes ya estuvimos ahí.
Creo que Diego tiene una oportunidad bárbara de poder ser mejor. Ojalá que le toque una mejora en la economía y pueda hacer todas las gestiones para poder conseguir más recursos y seguir trabajando por Exaltación.Rodrigo Etchart
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