La zona no cuenta con señalización y, sin dudas, se ha vuelto un peligro para quienes transiten por ella. Los frentistas han pedido en reiteradas oportunidades al Municipio una solución, pero no han sido escuchados.
Las quejas por la Ruta Provincial N° 192, que une nuestro distrito con Luján, han sido noticia hace tiempo. A la falta de luminaria se le suma, además, la falta de señalización que sin dudas hace que la zona sea propensa a los accidentes tanto automovilísticos como de otra índole.
Los vecinos, incluso, han presentado sus quejas al Municipio para pedir que se coloque la señalización que, durante algún tiempo supo tener la ruta, pero no han conseguido ninguna respuesta favorable hasta el momento y el temor de que ocurra una tragedia es cada vez más grande.
“Más que iluminación, que es difícil porque es una ruta que no es tan importante como la Ruta 8 o Panamericana, el tema es la señalización. A muchos les ha pasado de circular por la zona y la mayoría de los kilómetros de la ruta no están señalizados. Ha habido días de lluvia, de diluvio, que nos hemos ido de un lado a otro de la banquina, eso es un peligro”, contó una vecina en diálogo con El Lugareño.
Asimismo, destacó que también se da que ciclistas circulen por la zona sin el equipamiento necesario y que, sumándole la nula señalización en la ruta, es aún más peligroso. “Hay personas que circulan en bicicletas sin luces, sin nada ¿Quién controla eso? Si se pisa a alguien, se lo atropella, quién se hace cargo”, apuntó.
La frentista contó que en reiteradas oportunidades se ha comunicado con el Municipio pero que han hecho oídos sordos del reclamo: “he llamado, pero no me han dado la solución ni han señalizado. Hace meses que vengo con esto, llamando, reclamando por favor que me escuchen. Porque esto no es porque se nos antoja, es por seguridad. El Municipio es quien debe cuidarnos, pero no lo hacen, no están viendo la seguridad de la gente”.
“Hubo un momento en donde había un poco de señalización, pero con el tiempo se fue borrando porque si no se mantiene, el deterioro se va notando”, añadió la vecina.
Por último, consultada por sus sensaciones ante la falta de acción de la Comuna con los reclamos, apuntó a que por su parte seguirá pidiendo con la esperanza de ser oída. “Muchas veces protestando, haciendo reclamos me han escuchado. Entonces, para no quedarme con bronca, decido poner mi granito de arena para ver si se puede hacer algo. Quedarnos en que no nos hacen caso, no nos escuchan no sirve, yo seguiré luchando. Por un lado, me duele, pero hay que rezongar porque si no, no te escuchan”, cerró la vecina.
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